Pues sí, ya me gustaría que nuestro escudo, mi escudo, el de mi niñez, el de mis sonrisas, el de mi llanto, el de mi memoria, el de mis mañanas apagadas, el de mis noches encendidas, el de las palabras acabadas, el de mi música soñada, volviese a iluminar el pecho de nuestros jugadores. ¿Podrá ser?
2 comentarios:
Mientras las matemáticas no digan lo contrario, no debemos perder la esperanza.
Ojalá los actuales jugadores del Zaragoza se den cuenta de lo que significa ese escudo, y hagan honor a ese majestuoso león, y saquen todo lo que tienen.
¡Este domingo ganará el Zaragoza, Juan!. ¡Ya verás!.
Lamento hacer de aguafiestas,pero...me temo que ningún jugador de los que componen la plantilla del Real Zaragoza a día de hoy sabe lo que significa ser del Zaragoza. Ni siquiera Zapater, me temo...
No saben lo que es sufrir como sufristeis en Murcia, o vivir un Zaragoza - Eibar...o despellejarse la garganta con el gol de Nayim o de Galleti.
No, chicos...si se ha de ganar es porque se juegan su futuro laboral, porque pueden y saben hacerlo. El recurso a la épica me temo que no es aplicable ya en el futbol de hoy en dia. ¿Cuántos jugadores sienten sus equipos?. Puyol, Xavi, Raúl...y deja de contar...
Publicar un comentario