Bien, pues ya están todas las cartas sobre la mesa. Ya sabemos lo que tenemos y casi nos imaginamos con qué podemos contar. Sabemos que no hay dinero y tenemos deudas; sabemos que Antonio Prieto es la cara que tenemos que mirar y la mirada que tenemos que escudriñar; sabemos que Gay y Nayim (me gusta hablar de ellos como de una pareja indisoluble) serán los comandantes de la nave y lo único que nos falta por conocer es el nombre y los aperos de los guerreros que se sumarán a esta incruenta batalla que se avecina. (leer +)
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