domingo, 4 de noviembre de 2007

Víctor Fernández, el verbo consciente

Las tardes en el barrio eran siempre diferentes. Pareciera que el sol, ese altivo compañero de juegos y descubrimientos, era siempre el mismo, pero los chavales sabíamos que eso no era así, que en nuestras calles vivían muchos soles, tantos como chicos; muchas estrellas, tantas como chicas y alguna que otra luna, si bien todos ellos vestían pantalón corto y comían interminables bocadillos de mortadela chiripitiflaútica.

Había muchos soles y uno de ellos vivía al lado de las traviesas. Su mano derecha en ocasiones empuñaba una estilizada raqueta de tenis, esbelta como sus movimientos, y sus piernas eran capaces de recorrer kilómetros anchurosos como las explanadas que nos rodeaban: de casa al colegio, aquellos partidos a la sombra de "il bello Panatta", del colegio a La Camisera, de La Camisera...

Hoy su palabra ilumina, aturde, enciende, ofusca, limpia y exaspera. Su gesto es hermano siempre de su conciencia y la vida ha abrazado muchos de sus pasos y repudiado algunas de sus zancadas. Eligió la vereda de las praderas limpias por las que el futuro y la emoción de tantos han transitado, abrió la carne de todo un pueblo porque de ese pueblo era hijo y acogió la impaciencia de quienes sienten la urgencia del aliento inaplazable.

Aquí, en este rincón donde los mensajes encuentran cobijo, levantamos el recuerdo que creció con nosotros y se hizo verdad, no porque lo sea, sino porque la sentimos nuestra, que es lo mejor que nos puede ocurrir.


P.S.: Diario AS publica hoy una magnífica entrevista a Víctor Fernández de la mano de ese excepcional e inteligente mago del periodismo que es Tomás Guasch.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Solo una aclaración: sobre Tomas Guasch acepto lo de excepcional si nos referimos a su forofismo antibarcelonista y lo de mago por su habilidad para esconder entre bromas taberneras sus negruras y fobias de cualquier cosa que no lleve el sello de su amado Espanyol o de la casa madre madridista.

Lo siento, uno tiene sus límites que ha de mantener en cuanto al uso del término "periodista"....