Hola, amigos. Debo discularme por mi ausencia estos dos útimos días, pero mis obligaciones y devociones) profesionales me han llevado a mi muy querida tierra manchega para encontrarme con mis amigos de Madridejos (Toledo) y con mis nuevos amigos de Castro del Río (Córdoba), Fustiñana (Navarra), Coruña, Madrid y Cieza (Murcia). Han sido dos días productivos en lo laboral y jugosos en lo afectivo, por lo que doy por bueno no haber podido disfrutar del empate del Real Zaragoza en Gijón.
He dicho "disfrutar", pues por lo que he podido leer nuestro Real Zaragoza logró un meritorio punto en un campo difícil y repleto de aficionados sportinguistas que, como siempre, apoyarían a sus chicos con toda su alma, con lo que el empate, y lo que significa, lo damos por muy bueno.
He podido saber también, que el Real Zaragoza recupera a Ewerthon, que Pulido y Paredes estuvieron bien, que Pavón no se arrugó después de las críticas y que Abel Aguilar consiguió un gol que nos devuelve a su mejor versión en el Hércules. Con todo y eso, transformada la cara del equipo después de la dolorosa derrota antel Real Valladolid, hoy llega un Getafe crecido después de su victoria ante el VAlencia y a cuyo mando se encuentra nuestro querido Esnaider. No me queda otra, pues, que confiar en nuestrs chicos y alentar su esfuerzo para que la victoria caiga de nuestro lado.
Y será difícil, pues el equipo todavía está con un número importantísimo de bajas, bien por lesión, bien a causa de la selección, bien porque...¡Bueno! A estas alturas, tanto da. Y no es momento de seguir machacando lo de la mala planifición deportiva, pues poco se puede hacer a estas alturas. ¿O Kone es posible? Hum...
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